RESEÑA: Working Girl, una semana para enamorarte de Shana Gray.

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Título:  Working Girl Una semana para enamorarte

Autor: Shana Gray

Editorial: Titania

Número de páginas: 282

Precio: $323 .77 MX

Calificación: 3.5 /5

Siete días para enamorarte.

¿Quién será el hombre de la semana?

Tess Canyon tiene un objetivo claro: limpiar el nombre de su padre y vengar su muerte tras haber sido acusado de malversación de fondos en Diamond Enterprises. Y ahora se le presenta la oportunidad. Hay una vacante al puesto de secretaria de dirección y ella es una de las candidatas. Tess está decidida a superar la entrevista de trabajo…Aunque esta dure una semana entera y deba enfrentarse a una serie de pruebas complicadas para demostrar su valía. Cada día conocerá a uno de los directivos de la compañía:

Señor Lunes, Señor Martes, Señor Miércoles, Señor Jueves, Señor Viernes, Señor Sábado, Señor Domingo.

No será una semana fácil y las decisiones pueden ser complicadas, sobre todo cuando la atracción sexual está presente y el Señor Lunes se convierte en una distracción tan sexi. ¿Tomara Tess la decisión correcta? Y lo más importante, ¿será capaz de llevar a cabo sus planes de venganza?

Inicie la novela con altas expectativas, había recibido buenas críticas en otros países y yo estaba buscando algo diferente, ligero y entretenido para leer así que cuando Ediciones Urano me envió el boletín de sus novedades no dude un segundo en pedir Working Girl. La edición es preciosa, eso salta a la vista con su portada tan femenina en tonos rosa y blanco y la chica de vestido negro sentada en un sillón blanco que te da señales de lo que trata la historia: una mujer ejecutiva y femenina con un toque atrevido. Por dentro tiene una caligrafía llamativa al inicio de sus capítulos y la letra es pequeña.

La historia… Tess en una mujer cuya vida se fue a pica a los 15 años cuando su padre fue acusado de malversación de fondos y la vida a la que estaba acostumbrada se apago igual de rápido que la felicidad de su padre. Ahora, siendo una adulta Tess tienen un objetivo claro, demostrar que su padre es inocente de los cargos y acusaciones por los que fue despedido y que arruinaron sus vidas. El único problema es que al presentarse a la entrevista de trabajo que la pondría en la compañía que tanto odia se da cuenta de que, su plan no va a ser tan fácil de llevar acabo.

Y, por si fuera poco, cada día Tess se tendrá que enfrentar a una prueba que pondrá a prueba su valor, astucia y resistencia, y cada prueba la supervisara uno de los directivos de Diamond Enterprises, Señor Lunes, Señor Martes, Señor Miércoles, Señor Jueves, Señor Viernes, Señor Sábado, Señor Domingo, cada hombre diferente al anterior, cada uno atractivo e inteligente a su manera, pero sin duda el que más impacto tendrá en Tess es el súper sexi Señor Lunes.

Los Personajes:

Tess es una mujer que vio cómo su vida se desmoronaba por culpa de los grandes directivos de Diamond Enterprises, y que, tras la muerte de su padre, solo desea sacar la verdad y mostrarle al mundo que su padre no era el villano que la empresa mostró al público, así que la vacante en la empresa es su mejor oportunidad. De inicio el personaje está bien construido con un pasado que justifique su forma de ser y su sed de venganza, es un personaje fácil de leer, lo único que me molesta de Tess es sus pensamientos al estar cerca del Señor Lunes, se me hace muy exagerado y desesperado de su parte esa calentura y excitación que describe cada vez que toca al Señor Lunes.

Me hubiera gustado que la autora lo manejara de forma más realista, ya que me da la impresión de que esas escenas son de una mujer desesperada y urgida por algo de sexo. Algo un poco desagradable.

Señor Lunes es un hombre alto y musculoso increíblemente sexi de esos que solo salen en películas o en novelas como… esta… el lleva a cabo la primera prueba de Tess y será el encargado de llevarla a conocer a los demás Señores de la Semana. Es un hombre serio pero que poco a poco dejara ver su verdadero rostro.

Señor Martes es también súper lindo, musculoso y sexi, pero su actitud es muy diferente a Señor Lunes, pues este directivo es más alegre y divertido, que estará a cargo de llevar a Tess a su segunda prueba.

Señor Miércoles, Señor Jueves, Señor Viernes, Señor Sábado y Señor Domingo, también son súper sexis como sacados de películas y que supervisaran las demás pruebas a las que tenga que enfrentarse Tess. 

Lo que no me gusta es el tremendo cliché que se maneja en este libro, esos siete hombres súper musculosos, sexis y carismáticos me agobiaron y la actitud de Tess y esa necesidad de desahogarse sexualmente me pareció honestamente patético. Yo pensé que iba a tener erotismo, pero un erotismo justificado y bien trabajado y de eso no hubo nada, todo fue como:

“Te vi, por favor tómame aquí y ahora”

No sé ustedes, pero eso a mí no me va, me recordó a ciertos libros que cuando terminé de leer el primero (porque me fue imposible seguir con la trilogía) sentí una profunda lastima y pena por el personaje y su autora. Y NO por el tema sexual, eso es lo de menos (se respetan los gustos y preferencias de cada uno), lo que me molesta es la actitud del personaje femenino, que en Working Girl se repite, esa carencia de respeto hacia ti misma. 

Así que en general está bien, la historia es buena y eso de las pruebas y los Señores de la semana hace que el libro sea más interesante y nada soporífero, pues mantiene al lector alerta en cada capítulo a la espera del nuevo señor y de cómo será la siguiente prueba. El único detalle que le puedo criticar es el tema de la atracción de Tess y el Señor Lunes. Y no digo que el romance sea malo, solo que lo sentí muy apurado, un poco forzado; fuera de eso, es un libro muy ameno y que mantiene al lector al filo de la emoción por saber cual sera la siguiente prueba y como sera el siguiente Señor, y claro, posee un toque de erotismo muy leve que le da un toque picante y asertivo. 

Una lectura sin duda recomendable. 

Frases favoritas:

↠Éramos como dos imanes que se atraían el uno hacia el otro, y yo necesitaba recurrir a toda mi fuerza de voluntad para resistir aquel tipo de magnetismo. (pág. 25)

↠Sentí el calor de su cuerpo, fue como ser besada por el sol. Su delicioso aroma me hizo cosquillas en la nariz y lo inhale, casi como un suspiro de satisfacción. (pág. 37)

↠Era todo un hombre. La clase de hombre en el que cualquier mujer podría perderse. (pág. 50)

↠Las infancias decepcionantes pueden dejar cicatrices desagradables. (pág. 54)

↠No es suficiente con creerlo. Tiene que saberlo. Estar completamente segura de ello. (pág. 68)

↠Me pregunte si eso sería realmente una preocupación importante para alguien, la reputación. (pág. 72)

↠Una chispa muy grande que hizo que me temblaran todos los nervios y los músculos del cuerpo. (pág. 95)

↠Era descarado e increíblemente atractivo, y me recordó a un montañés escoses musculoso, como Jamie Fraser. (pág. 95)

↠Su voz era mágica. No había rastro alguno de acento escoces, pero a pesar de ello, provoco la reacción adecuada en partes de mi cuerpo que hacia demasiado tiempo que no vivían ningún tipo de magia sexual. (pág. 95)

↠Tiene gracia que todos tengamos alguna clase de miedo, pero cuando te pasa a ti pierdes las ganas de reírte. (pág. 114)

↠Sus palabras fueron bajas y suaves, tiernas y tenía los ojos llenos de una nueva emoción: pasión. (pág. 122)

↠La expresión de la cara del Señor Miércoles me hizo sentirme triste, pero había experimentado un momento de claridad en cuanto vi al Señor Lunes. Si iba a besar a alguien, seria a él. (pág. 123)

↠Sabía a qué hombre deseaba, pero la dirección que iba tomando mi futuro estaba mucho menos clara. (pág. 125)

↠Todo mi cuerpo se encendió por aquel hombre, y no sabía cómo acabaría el día en ese filo de la navaja de excitación en el que me tenía. (pág. 168)

↠O iba a admitir mi miedo, ya lo había hecho bastante aquellos últimos días. (pág. 187)

↠Yo estaba perdida en mi cuerpo, adorando el modo en el que me sentía bajo su contacto. (pág. 225)

↠Lo deseaba, de todas las maneras imaginables. (pág. 226)

↠Me estire como el gato en Alicia en el País de las Maravillas. Contenta. Satisfecha. No había sentido tal felicidad en años. Y todo a causa de aquel hombre que tan solo conocía como “el Señor Lunes”. (pág. 240)